Fuente: "La Voz de Galicia"
Los vecinos de O Cereixal no se lo creen. El famoso cartel de la marca Osborne apareció pintado a pesar de que está situado en un monte de difícil acceso.
Uno de los símbolos de la patria española, el toro de Osborne, ha sufrido un atentado. En concreto hablamos del situado en O Cereixal, en Becerreá, que apareció pintado de rosa para sorpresa de todos los conductores que circulan por la A-6. No se sabe quién o quienes han sido los autores de la pintada, pero la verdad es que se hizo a conciencia, porque está totalmente pintado de rosa, salvo los cuernos, que lucen de negro, y el rabo, de azul. Es un cambio de imagen total, vamos, del negro al rosa hay distancias. Los vecinos están perplejos con la estampa, porque para subir hasta el lugar donde está situado hay que subir una pendiente, hasta los 823 metros de altitud. Desde el cementerio de O Cereixal hay más de quince minutos de duro ascenso.