Fuente: "La Voz de Galicia" El dinero, cuya procedencia se investiga, apareció en dos cuentas de empresas de Lalín Movimientos a través de la banca electrónica y durante los fines de semana |
(Lugar: la voz| lugo/lalín)
La Guardia Civil de Lugo y de Lalín mantiene abierta desde hace unos días una investigación relacionada con una operación bancaria irregular en la que se podría estar moviendo una cantidad de dinero de unos ocho millones de euros, según las estimaciones iniciales. Por el momento, una persona fue detenida y, según apuntan algunas fuentes, en las próximas horas podría producirse un segundo arresto. El mutismo por parte del instituto armado en relación con la actuación es total.
La operación que los investigadores tratan de esclarecer es muy compleja y se cree que puede constituir una trama con implicaciones no sólo en las provincias de Lugo y Pontevedra sino también a nivel nacional. «Es una auténtica operación de ingeniería financiera de la que, por ahora, no se conocen las consecuencias exactas», aseguraron ayer diversas fuentes.
El dispositivo fue puesto en marcha, al parecer, hace unos días cuando la Guardia Civil fue informada de que un hombre de entre 22 y 23 años se había presentado en la oficina que el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria tiene en la avenida principal de Becerreá con la intención de cobrar más de 300.000 euros. La petición despertó sospechas, básicamente por la circunstancia de que un joven se dispusiese a llevarse semejante cantidad de dinero en efectivo.
Autónomo sin capacidad
El muchacho fue detenido por los guardias civiles. Las primeras pesquisas revelaron que se trataba de un autónomo sin capacidad aparente para mover el importe reseñado. Los investigadores comenzaron a sospechar de que el joven estuviera actuando en nombre de otras personas.
Esta primera detención motivó la puesta en marcha de una investigación que todavía se encuentra en su fase inicial y que, según algunas fuentes, se presenta muy compleja porque lo primero que descubrieron los agentes fueron movimientos artificiosos en diversas cuentas y tendentes posiblemente a despistar. El hecho de que las pesquisas estén, al parecer, en los comienzos hace que, por el momento, no se pueda determinar si la operación bancaria irregular constituye un delito de estafa, de una evasión de dinero o de blanqueo.
En cuanto a la circunstancia de que los investigadores manejen actualmente una cantidad estimativa de ocho millones de euros, obedece al descubrimiento de dos cuentas bancarias a nombre de dos empresas de Lalín por un importe de cuatro millones de euros cada una. El nombre de las dos compañías implicadas no fue dado a conocer.
Transferencias
De una de las cuentas mencionadas, al parecer, llegó a ser transferida a otra una suma de alrededor de dos millones de euros. La Guardia Civil trata de dilucidar cuestiones que son claves como, por ejemplo, la procedencia del dinero. Tampoco se pudo saber hasta ahora si los responsables de las empresas conocían la existencia de ambas cuentas.
La única persona detenida permanecía ayer a la espera de la decisión que debe adoptar el juez que se encarga del caso. Al parecer, la Guardia Civil ya ha solicitado a la autoridad judicial la práctica de diversas diligencias.